Los técnicos del Área de Infraestructura Verde Urbana del Ayuntamiento de Huesca, tras realizar un exhaustivo diagnóstico, han decidido apear los pinos del parque San Martín por seguridad.
Tras la caída de 4 árboles en las últimas semanas, los técnicos han detectado que los pinos, plantados sobre praderas de césped en los años ’90, presentan diferentes defectos que provocan que no tengan la estabilidad que deberían.
Defectos que, como han dejado claro los técnicos en su informe, no provocaban síntomas exteriores y, por lo tanto, son prácticamente indetectables. Precisamente, el desarrollo de las obras de regeneración del parque han permitido sacar a luz estas deficiencias.
El principal defecto, ha explicado el concejal de Medio Ambiente, Roberto Cacho, “es que las raíces de los pinos son deficientes. No tienen profundidad ni son lo suficientemente grandes ni fuertes para sujetar a los árboles, que tienen mucho peso”. Por ello, ha continuado, “y priorizando en todo momento la seguridad de los ciudadanos, hemos tenido que tomar esta decisión, que no ha sido nada fácil”.
La decisión técnica y por seguridad de apear los pinos del parque ha contado con el respaldo de todos los grupos municipales del Ayuntamiento en la Comisión de Medio Ambiente celebrada de urgencia este viernes por la mañana; así como del Consejo Sectorial de Medio Ambiente – Mesa Cambio Climático.
Tal y como han analizado los técnicos, ha detallado el concejal, “los árboles no desarrollaron raíces en profundidad porque, al plantarse en una pradera de césped con riego automatizado por aspersión, tenían acceso al agua en superficie. Además, en algunos ejemplares también se detectan defectos de plantación ya que la escayola y los hierros que rodeaban algunos árboles han impedido el correcto crecimiento y anclaje de las raíces”.
Cacho ha explicado que “al haber fallos en la plantación, y al haber sido plantados todos los pinos en la misma fecha, estén colapsando al mismo tiempo. Por ello es muy importante realizar las plantaciones de manera correcta, ya que los fallos pueden permanecer latentes durante décadas”.
Ya se han apeado los pinos que conllevaban un mayor riesgo a la seguridad y se continuará con el resto a lo largo de las próximas semanas. Una vez finalizada la retirada de los árboles se procederá a realizar nuevas plantaciones de manera inmediata.